¿Por qué te duele tanto, Hugo?

Actualizado en 2008-03-03 18:55:52 / Por Juan Manuel Ruiz

Chávez: ahí están las pruebas

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El minuto de silencio de Chávez y sus amigos en memoria de Raúl Reyes es elocuente: es una bofetada a las víctimas de la violencia en Colombia, a todas, sin excepción.

Más allá de la andanada de Chávez contra el presidente de Colombia, lo que queda claro es que el presidente venezolano resintió el golpe contra las Farc como un golpe contra él mismo. No sé cómo los chavistas podrán ahora explicar lo sucedido.

En este momento se me ocurre pensar en las víctimas de la masacre de Bojayá, 119 en total, por quienes no hubo un minuto de silencio de parte del señor Chávez.

Tampoco lo hubo por los 11 diputados del Valle del Cauca, masacrados el año pasado por las FARC en venganza por la muerte de J.J.

Mucho menos hubo un minuto de silencio en Venezuela por las 39 víctimas del atentado al Club El Nogal, ni por los 3 mil secuestrados por esa guerrilla, ni por los militares caídos en combate.

Chávez y Correa reaccionaron como uno reacciona cuando le matan un amigo. Es más, cuando le matan a un socio o un aliado. Porque pocas veces está uno dispuesto a tomar venganza cuando le matan a un amigo. A lo sumo uno lo lamenta y ruega a Dios castigo divino. Pero no está dispuesto a irse a la guerra.

Creo yo que en Venezuela quienes tienen más de dos dedos de frente deben de estar muy preocupados por lo que está pasando con su presidente. Chávez toma las cosas personalmente, sin razón y sin medida, y se desboca con un odio inusitado. ¿Qué le ha hecho Colombia, qué le ha hecho el presidente Uribe, para semejante vocabulario en el que sólo falta que pronuncie la palabrota mayor de todas?

A Chávez lo que le duele es que ha quedado desnudado en pleno, para tristeza de quienes en sus comienzos, como lo he dicho en otras columnas, creíamos que lideraba un proyecto para acabar la pobreza y la desigualdad en su país.

Ahora bien: desde el punto de vista militar, el dolor debe ser muy grande porque grande fue el daño que se les hizo a las Farc con la muerte de Reyes.

No fue cualquier golpe. Evidentemente, Colombia deberá responder por haber violado la soberanía de Ecuador. Eso es obvio. Fue una reacción arriesgada y vamos a pagar las consecuencias de ello. Ningún gobierno, óiganme bien, ningún gobierno nos va a salir a apoyar porque esa es una de las principales infracciones al derecho internacional público.

Pero eso no oculta lo de fondo. Y lo de fondo es que Chávez y Correa son aliados de las Farc y, como éramos pocos, parió la abuela. Ahora, por fortuna, los amigos de las Farc han quedado desenmascarados.

No quiero insistir en el asunto: pero la verdad ahora es clara y prístina. Ya sabemos quiénes están con nosotros y quiénes no. Eso es una ventaja. Y eso que lo peor no ha llegado todavía: vienen un par de golpes muy duros para las Farc antes de finalizar el año. Para quienes deseen más datos los invito a buscar en google este artículo que escribí hace dos años para la prensa internacional. Se titula “Para atrapar a Raúl”. Ahí están los detalles que ahora resultaron ciertos.